En mi trayectoria como artista textil, siempre he buscado ir más allá de lo convencional. Sentía la necesidad de encontrar una musa que reflejara no solo mi estilo, sino también mi espíritu indomable y mi deseo de desafiar las normas. Quería crear obras insolentes, rupturistas y egocéntricas, estrellas que no pudieran pasar desapercibidas.
Mi musa debía ser la esencia de todas las musas, la Diva de las Divas, una leona que llevara al arte contemporáneo a un nuevo nivel de provocación y poder. Así encontré a Baddie Winkle, una activista e influencer que, a sus 85 años, se convirtió en un ícono de autoexpresión y desafío a los estándares de belleza impuestos por la sociedad. Su estilo audaz y su actitud rebelde representan una declaración rotunda contra las limitaciones falsas que la industria de la belleza impone, especialmente a las mujeres.
Para darle más carácter a mi obra, la retraté homenajeando a Kurt Cobain, el revolucionario del rock que cambió la escena musical en meses. Además, incluí en su atuendo una referencia al famoso “Ecce Homo” de Borja, subrayando así la irreverencia y la audacia de esta nueva personalidad en el mundo del arte contemporáneo.
Con estas obras, cierro mi colección Primigenia. Cada pieza ha sido un desafío y un aprendizaje, y estoy lista para demostrar al mundo que ¡soy la puta ama del crochet!